¡Ayuda! Ahora que termina el confinamiento estoy gastando demasiado

¿Eres una de esas personas que no tenía ahorros hasta que llegó la pandemia? El confinamiento que nos obligó a todos a quedarnos en casa tuvo muchos efectos secundarios, pero uno de ellos fue que los que tuvimos la suerte de seguir trabajando nos encontramos con que de repente era un poco más fácil ceñirnos a nuestro presupuesto. 

Ahora que se acaba el confinamiento, es posible que te encuentres con que vuelves a gastar más. De repente, todos esos buenos hábitos para gestionar tu dinero que creías tener han desaparecido, y tus objetivos de ahorro vuelven a ser más difíciles de alcanzar. ¿Hay alguna forma de solucionar esto? 

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Piensa en tus ahorros a largo plazo

Acabas de sobrevivir a una pandemia mundial y vas a salir de ella con tu salud y tu dinero intactos. Eso es algo que merece la pena celebrar y no hay nada de malo en que tus primeras semanas o meses sin confinamiento sean más festivos de lo habitual. 

En vez de eso, empieza a pensar en tus ahorros de una forma más global: ¿cuánto quieres tener ahorrado para finales de año? Es posible que no consigas alcanzar ese objetivo en verano, pero probablemente volverás a una rutina más tranquila en otoño e invierno. Ponte objetivos de ahorro para cada mes que tengan sentido teniendo en cuenta tus planes para esas épocas. Podrías ahorrar menos en verano y ponerte al día en invierno, o al revés, si es así como funciona tu vida. 

Inspírate en el año pasado

Aunque muchos de nosotros anhelábamos salir de fiesta como en los viejos tiempos, especialmente en 2020, no hemos podido hacerlo y como resultado nos hemos visto obligados a ser creativos. Las salidas nocturnas a restaurantes o bares se han convertido en picnics en parques donde llevamos nuestra propia comida y bebida. Eso nos permite divertirnos un poco y a la vez no correr riesgos. Además, suele ser más barato. 

No hay ninguna razón por la que eso no pueda continuar. Si eres el tipo de persona que se dio cuenta de que disfrutaba de los paseos por el parque o por el río, incorpóralos a tu vida después de la pandemia. Esas actividades al aire libre, a las que te veías obligado porque todo estaba cerrado, pueden seguir siendo agradables, aunque ya no sean la única opción. 

Convierte tus experiencias como inversor en un hábito  

Mucha gente aburrida en casa recurrió a la inversión por primera vez durante el confinamiento para conseguir el tipo de emociones que las horas de Netflix y las llamadas de Zoom ya no les proporcionaban. Así es como surgieron memestocks como Gamestop y AMC. 

Si eres una de esas personas (o incluso si no lo eres), considera la posibilidad de convertir la inversión en una parte más importante de tus hábitos financieros. Aunque invertir siempre conlleva riesgos, cuando se hace bien, puedes hacer crecer tus ahorros e incluso convertir esos beneficios en ingresos extra que pueden ayudarte a hacer más fácil la gestión de tu economía. Hay un montón de maneras de hacerlo, y si no sabes cómo empezar, echa un vistazo a nuestras Clases Vivid.