Cómo evitar las criptoestafas
El 1 de noviembre, justo después de que El Juego del Calamar alcanzara el punto más álgido de su boom de popularidad, algunos inversores invirtieron su dinero en una criptomoneda con el nombre de la exitosa serie de Netflix.
SQUID, una moneda que se presentaba a sí misma como una criptomoneda "play-to-earn" (generalmente esto significa jugar a un videojuego y obtener una recompensa en cripto), subió lentamente de 15 a más de 30 dólares y despertó el entusiasmo de los usuarios. Después, en el lapso de unos pocos segundos, se disparó a más de 2.860 dólares y, a continuación, se desplomó hasta los 0 dólares. Los desarrolladores de la moneda, que habían restringido a los usuarios la posibilidad de retirar dinero, vendieron a un precio elevado y luego borraron todas sus cuentas en las redes sociales y eliminaron su sitio web. Un usuario que había puesto en la moneda los ahorros de toda su vida, 28.000 dólares, lo perdió todo.
En el mundo de las criptomonedas, esto se conoce como "rug-pull", pero la mayoría de nosotros lo llamaría de otra forma: una estafa. Como sucede en todos los contextos en los que hay dinero de por medio, las estafas son habituales en el mundo de las criptomonedas. Pero hay formas de protegerse.
Céntrate en las monedas con una trayectoria consolidada
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Uno de los principales atractivos de las criptomonedas es entrar pronto: encontrar una moneda cuyo valor aún no se ha disparado y aumentar exponencialmente tu inversión.
Por eso puede ser tentador encontrar nuevas monedas que están empezando. Pero sin una trayectoria consolidada, puede ser realmente difícil separar la estafa del auténtico negocio.
¿Qué se considera una moneda establecida? Es algo más que el simple hecho de existir desde hace mucho tiempo. Busca monedas que hayan pasado por períodos de volatilidad. Si una moneda ya tiene unas cuantas montañas rusas a sus espaldas, es más probable que sus desarrolladores no estén buscando dar un golpe de efecto de improviso.
Pero el historial por sí solo no garantiza que no te vayan a estafar, lo que nos lleva al siguiente punto.
Fíjate en la capitalización de mercado
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Muchas estafas con criptomonedas se basan en el llamado “pump and dump”. Consiste en que unos pocos usuarios, a veces los desarrolladores de la moneda, acuerdan inflar el precio comprando una gran cantidad de ella y coordinando cuándo venderla para obtener un beneficio, mientras que el resto se queda con una moneda que ha perdido su valor.
Para ello es necesario que los estafadores sean capaces de poseer una cantidad suficiente de la moneda como para mover su precio. Con las monedas que tienen una mayor capitalización de mercado (el valor total de todas las monedas en circulación), esto es obviamente más difícil. La capitalización de mercado de la moneda SQUID, por ejemplo, no ha podido ser verificada, pero según sus propios datos llegó a ser de unos 295 millones de dólares. Bitcoin, en cambio, tiene una capitalización de mercado de más de 1 billón de dólares (casi 3400 veces más). Se necesita mucho más poder financiero del que tiene la mayoría de la gente para mover Bitcoin.
Investiga quién es el desarrollador
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En el caso de las criptoestafas, el culpable suele ser alguien que ha tenido acceso a la moneda desde el principio. No es raro que sea el propio desarrollador. Crear tu propia criptomoneda es relativamente fácil y está muy poco regulado, lo que significa que hay oportunistas que a menudo crean una moneda para enriquecerse a costa de los demás.
Por eso es importante investigar un poco sobre el desarrollador de la criptodivisa en la que quieres invertir. ¿Son desconocidos? ¿Está respaldado por grandes nombres? ¿Hay una comunidad detrás del proyecto con una audiencia considerable? Hay que tener en cuenta todos estos factores. Cuanta más experiencia y presencia tenga un desarrollador, más probable es que se dedique a la moneda por sus cualidades y no sólo para obtener ganancias rápidas.
Todos estos consejos te ayudarán a evitar estafas, pero al final, incluso los más hábiles pueden caer en la trampa. Utilizando intercambios que verifican las monedas en las que los usuarios pueden invertir (la cartera de Vivid, por ejemplo, ha sido seleccionada por nuestros expertos en criptomonedas), puedes contar con otro nivel de seguridad. De este modo, lo único que te impide hacerte rico es tu propia habilidad como inversor, no la malicia de otra persona.